Un día cuesta arriba

flat1000x1000075f-1-976x6301-976x630Comienzo la mañana, con el sonido de la alarma de la estufa de pellets, que a intervalos de dos segundos me anuncia que algo va mal.Debí limpiarle las cenizas ayer. La apago para que se enfríe y poder limpiarla. Mientras, comienzo mi ritual de trabajo. Saco pan del congelador, bajo al bar y lo pongo a hornear. Subo el desayuno a mi hijo.Enciendo la cocina de leña.Subo varios viajes de leña.Saco el pan del horno, meto los pimientos y las patatas. Me maquillo mientras me tomo un café.Salgo a  comprar el tabaco y el periódico. Saco los pimientos.Enciendo la freidora. Doy un sorbo al café.
Hago una tortilla de patatas. Limpio las vitrinas. Doy un sorbo al café. Preparo los pinchos.Hago  fritos. Coloco todo en la vitrina de la barra. El café se ha helado.Subo a echar leña al fuego. Traigo un barril de cerveza  al almacén. Saco la basura del almacén al coche.Subo a por papel higiénico para los baños. Bajo  dos cajas de vino. Relleno  coca-colas y botellines de agua en la cámara. Me hago otro café. Abro el Bar. No hay nadie por la calle. Subo a comprobar el fuego. Mi hijo me advierte de que el bol de nata que montamos ayer se le ha caído al ir a coger un yogur. Lo veo, delante de la puerta del frigorífico hay un montón de nata.Lo que no me ha dicho es que la balda de cristal donde estaba el bol también se ha caído.Tengo el suelo de la cocina salteado de nata montada y cuadraditos pequeños de cristal.  Me dice que ha intentado limpiarlo pero que no sabía si usar la escoba o la fregona. Le digo que no se acerque, que se puede cortar, que ya lo limpiaré yo. En el recibidor,un líquido negro rezuma por debajo de la estufa. Hay que vaciar la caperuza de la condensación.Al soltarla,es como si un calamar gigante hubiera estallado en el rellano de mi escalera y todo queda salpicado de un líquido viscoso negro.Voy al baño. Me lavo la cara y las manos, suerte que voy de negro. Las manos me quedan negras.Me froto con un cepillo y vinagre. Siguen negras.Me froto con limón. Me escuecen las manos. Con lejía. Un poco mejor. Corro abajo.
En el Bar, me espera un cliente con cara de » Ya era hora, pero, qué servicio es éste?» Podría inventarme una historia de emergencia vital como que le ha dado un infarto a alguien o a mí, pero si me hubiera dado un infarto no entraría corriendo por la puerta y es que cuando la realidad supera la ficción, no hay manera de hacerla creíble. De otro modo, tendría que hablarle de cómo combustionan los pellets y de la condensación del vapor de agua según la sección de tubería y de nata montada y cristales rotos y tinta de calamar, etc,etc…Y este señor está para café descafeinado de cafetera con sacarina y leche templada, YA! Aún así, con la imprescindible sonrisa, dada la situación, comienzo una explicación que me redima, pero este señor no quiere o no tiene tiempo de escucharme. Yo, para entonces, ya estoy haciendo KATAKLAK, BRUMM-BRUMM ,FFFSSSS, con la cafetera, cuando me doy cuenta de que los sobres de sacarina que ayer me anunciaron que se acababan, pues mira, no se sabe cómo , se han acabado.No, no busques, se han acabado. Se me ocurre que puedo colar azúcar en el café y presentar como un extra del servicio haberle añadido ya la sacarina, en lugar de eso, salgo corriendo y subo a casa en busca de un dosificador de edulcorante que tengo por ahí, después de colocarle el café delante, con la intención de estar de vuelta antes del segundo que va a tardar en darse cuenta y reclamar la sacarina. Arriba huele a madera quemada y se está formando una nube de humo por toda la casa. Bajo volando. Cuando el señor se va, corro otra vez para arriba. El humo y el olor, vienen de la estufa que ya he apagado.Levanto la tapa del depósito de pellets y descubro que algunos están ardiendo,en brasas.Pido a mi hijo que me ayude y empezamos a echar un poco de agua ahí donde vemos un pellet ardiendo. Abro ventanas y puertas.Bajo a comprobar si ha entrado alguien en el Bar. Sirvo dos cafés con leche.Subo otra vez. Al cabo del rato de subir y bajar, el depósito de la estufa es una masa de serrín mojado, pero hemos acabado con el peligro.Toda la casa sigue oliendo a humo y hace un frío infernal.Confino a mi hijo a quedarse junto a la cocina económica para estar caliente y sin moverse para no pisar los cristales con nata montada. Bajo al Bar. Empiezan a venir los clientes.Ya no me puedo escapar.
Tras cinco horas de correr de un lado para otro sirviendo vinos,bocadillos,pinchos y cafés…, cuando todo ha acabado, subo, vacío el serrín mojado, limpio las cenizas, conecto la estufa y no funciona.Vaya, se ha debido de mojar el motor o algo vital. Suerte que a mi hijo le tocaba hoy cambio de casa y se ha ido con su padre.
Salgo a la calle a fumar. Apoyada en el quicio de la puerta, veo pasar a  dos mujeres por la carretera.Intento imaginar su vida doméstica, me pregunto si sus vidas son cómicas, dramáticas o aburridas o cómo demonios son sus vidas.
Estoy pensando en poner un anuncio.»Busco pareja. Abstenerse chicas. Requisitos del candidato, buena presencia,inteligente, culto, con sentido del humor, que sepa cocinar y pueda hacer varias cosas a la vez, con experiencia demostrable en barra, arreglo de aparatos y chapuzas caseras.Se valorarán conocimientos en música y cine aunque no son imprescindibles, ofrezco formación en este campo. Ah! Recomendable haber hecho algún cursillo de supervivencia.»
A ver si cuela!
Son las diez y media de la noche. Al subir a casa le he dado  al interruptor del pasillo y no se ha encendido la luz. Me he puesto la frontal para cambiar la bombilla.Nada. Descubro que el cable que cuelga del techo tiene los hilos de cobre separados.Me dan ganas de llorar, pero me aguanto. Me siento en el sofá,  con dos mantas encima y la frontal puesta y enciendo la tele con toda la intención de encontrar una película que me embote el cerebro. La casa es una nevera .Suena el teléfono.Es un amigo.Me pregunta qué estoy haciendo. Le digo que voy a ver una peli. -«Qué bien vives! Las diez y media y ya desocupada…»
Pongo cara de emoticono de whatssap. Esa, sí, la carita roja de ira, sólo que la mía tiene una frontal en la cabeza.

2 comentarios en “Un día cuesta arriba

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s